lunes, 2 de junio de 2014

LA PLATA SE GANA TRABAJANDO

Tanto los diputados como los senadores, además de sus dietas (sueldos) y lo que se comenta como “módulos”, es decir un plus de dinero por vaya a saber qué motivo, reciben pasajes aéreos para ir y venir de sus respectivas provincias, lo que desde cierto punto de vista, sería correcto, si no fuese que los pasajes que no utilizan, los pueden cambiar por dinero.
Un informe de Poder Ciudadano (www.poderciudadano.org) dice que “la mitad de los 72 legisladores que integran el Senado hasta diciembre de 2013 canjeó por dinero en efectivo entre el 75% y el 100% de sus respectivos pasajes aéreos y terrestres durante todo 2012 y el primer semestre del año pasado”.
Esto significa que debido a esa acción, aumentaron sus ingresos entre $180.900 y $241.200 en esos 18 meses. Según el informe en la cámara de diputados el porcentaje es mayor.
Solo tres senadores no canjearon ningún pasaje por dinero en efectivo, ellos son:  Fabio Biancalani (FPV), Roy Nikisch (UCR) y Juan Carlos Romero (Frente Popular Salteño).
Lo terrible no es que los legisladores que viven lejos utilicen todos los pasajes, lo terrible es que hay legisladores que viven en Capital o el Conurbano y como no los utilizan, o hacen política regalándolos, o los canjean ganando unos $20.000 mensuales.
Todo esto nos hace sentir como tontos a quienes nos cuesta mucho hacer un viaje por el país y sobre todo a los que trabajamos para ganar nuestro dinero y no tenemos las facilidades que tienen quienes cobran mucho más que la media de los trabajadores. Esos pasajes y sus altos sueldos los pagamos con nuestros impuestos.

Es inmoral que puedan canjear pasajes por dinero o regalarlos a discreción. Los que no usan debieran devolverlos. Así se hace la democracia defectuosa, mal entendida y desigual, en favor de los empleados públicos de alto rango.